Teca, una mezcla entre gran durabilidad, resistencia y belleza.

Desde cualquier tipo de mobiliario, hasta la cubierta de un yate, la madera de teca se encuentra presente  en mucho de la decoración contemporánea debido a su gran resistencia y a la belleza de su veta.  En los últimos años ha aumentado considerablemente el uso de maderas tropicales como alternativa para la decoración y mobiliario.

La madera de teca verdadera procede de la especie Tectona Grandis, de la familia de las Verbenáceas. Este árbol se da naturalmente en Tailandia, La India, Myanmar, Indochina y Java, pudiendo alcanzar alturas de hasta 40 metros. También se cultiva en plantaciones de áreas tropicales en África y de América Latina. Es de un color amarillento o dorado, aunque se suele oscurecer con un tratamiento natural extraído también de este árbol, el aceite de teca. Es una madera de gran finura y fácil de trabajar, de fibra sólida y densa. No es corrosiva y resiste a termitas y hongos. Gracias a la impermeabilidad que le proporciona su aceite (que deberemos aplicar al menos dos veces al año para preservar el aspecto original de la madera), también resiste a la humedad sin requerir pintura ni barniz.

Debido a su belleza y a sus propiedades, esta madera se encuentra en auge en términos de comercio y exportación mundial.  

Cualidades que aprecia el carpintero:

-               Capacidad de no dañarse con el contacto del metal

-               Belleza inigualable de su veta

-               Alta resistencia a la humedad

-               Alta resistencia a hongos e insectos